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¡Revive tu césped en 5 pasos sencillos!

Revive el césped

A veces se dice que el césped es el alma de un jardín. Si bien es cierto que las flores y los arbustos aportan color y vida, el césped es el que da esa sensación de frescura y naturalidad. Pero, ¿qué hacer cuando nuestro césped no está tan verde y saludable como nos gustaría? En este artículo, te mostraré cómo tu césped revive tras 5 pasos sencillos.

Revivir un césped no es una tarea complicada. Con un poco de esfuerzo y siguiendo estos pasos, podrás tener un césped verde y saludable en poco tiempo. Los pasos son: eliminar la capa de materia orgánica sobre el suelo, combatir la compactación, mejorar el drenaje, alimentar el césped y arreglar los bordes.

La mitad de la composición de un suelo sano es espacio poroso. Un suelo muy denso evita que las raíces de tu césped lleguen al agua, los nutrientes y el soporte estructural que necesitan.

Ahora, entremos en detalle.

1. Elimina la capa de materia orgánica superior (conocida como thatch)

Encima de tu césped seguro que encuentras una capa de materia orgánica muerta, como el musgo, tallos, raíces o la hierba. Se acumula en la superficie del suelo con el paso del tiempo. Ella es una de las razones por las que la hierba no revive en tu jardín. Esta capa es conocida como thatch, por su nombre inglés. Vamos a utilizar su denominación inglesa porque es más breve.

En el césped, si hay demasiado «thatch», el agua y los alimentos no llegan bien a las raíces. Y si las raíces no comen, la hierba no crece fuerte y bonita.

¿Por qué se forma el thatch en el césped?

Hay bichitos en el suelo, como lombrices y microorganismos, que ayudan a deshacer esta capa. Pero si no hay muchos de estos amigos o si damos demasiado abono al césped o abusamos de fungicidas e herbicidas, el «thatch» puede crecer mucho. Además, si usamos productos que matan a los bichitos, como algunos venenos o , el «thatch» no se descompone bien.

¿Cómo podemos solucionarlo?

Hay máquinas que ayudan a quitar esta capa sobrante. Estas máquinas, llamadas escarificadoras, sacan los restos a la superficie. Luego, con un rastrillo, podemos recogerlo. Es como cuando te cepillas el pelo y quitas los nudos. Es mejor hacerlo cuando el clima está fresco, como en otoño. Y recuerda, solo hay que hacerlo cuando sea necesario, no siempre.

Para que tu césped esté feliz, es bueno que tenga aire y comida. Con ello te aseguro que revive. Así que, además de quitar el «thatch», podemos hacer agujeritos en el suelo para que respire mejor. Y si el suelo es muy ácido, podemos añadir cal para equilibrarlo.

En resumen, cuidar del césped es como cuidar de una mascota. Si le damos cariño y atención, nos lo agradecerá siendo verde y bonito. ¡Así que manos a la obra y a revivir ese jardín!

2. Combate la compactación

Con el tiempo, el suelo bajo el césped puede compactarse, lo que dificulta el crecimiento de las raíces y favorece la aparición de musgo. Para solucionar este problema debemos hacer pequeños agujeritos en el suelo, lo que mejora la circulación del aire y el agua.

  1. Aireación: En los jardines habituales, que no son de grandes dimensiones, basta con hacer unos cuantos agujeros en la tierra con una horquilla. Si el suelo está muy duro podemos usar un rodillo.
    • Para pequeñas zonas: Clavas la horquilla en el suelo y la mueves de un lado a otro. ¡Es como peinar el césped!
    • Para zonas más grandes: Aquí necesitarás una máquina especial que hace agujeritos y saca trocitos de tierra. Así, las raíces tienen más espacio para crecer.
  2. El momento perfecto: Si quieres que tu césped esté feliz después de airearlo, hazlo cuando todavía le quede tiempo para crecer. Si tu césped es de los que les gusta el calor, airea en primavera o verano. Si prefiere el frío, mejor en otoño o inicio de primavera.

3. Mejora el drenaje

Después de airear la hierba, es una buena idea aplicar una capa de abono sobre la superficie. Con ello la hierba de tu jardín revive y se verá más sana. Puedes comprarlo en centros de jardinería o hacerlo tú mismo mezclando arena hortícola con tierra de jardín. Esta mezcla ayudará a mejorar el drenaje y proporcionará nutrientes esenciales al césped.

¿Por qué es bueno para el césped?

  1. Mejora el drenaje: Si después de una lluvia ves charcos en tu césped, puede ayudar a que el agua se vaya más rápido.
  2. Evita la acumulación de «thatch»: Esa capa dura que a veces se forma en el césped. Así introduces microbios buenos que evitan que se forme.
  3. Pero cuidado: Si pones demasiado, puedes tener problemas de compactación otra vez. ¡Y eso no queremos!.

4. Alimenta tu césped

El hierba, como cualquier otra planta, necesita nutrientes para crecer fuerte y saludable. Por eso, es recomendable aplicar un fertilizante específico para césped en otoño. Este tipo de producto es rico en fosfatos y potasio, que fortalecen las raíces y preparan la hierba para el invierno.

5. Arregla los bordes

Para darle un toque final a tu jardín, puedes arreglar los bordes con un cortacésped. Esto le dará un aspecto más limpio y profesional.

Necesidades césped natural

En resumen, con un poco de esfuerzo, consejos sencillos y dedicación, puedes tener una pradera envidiable y asegurarte que el césped revive. No olvides regarlo regularmente y cortarlo con frecuencia para mantenerlo en perfectas condiciones. Y recuerda, un césped saludable no solo mejora el aspecto de tu jardín, sino que también crea un espacio agradable donde relajarse y disfrutar del aire libre.

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